SÍNDROME DEL NIDO VACÍO

Síndrome del nido vacío se da a madres cuyos hijos se han hecho mayores y se han independizado del hogar familiar. Estas madres sienten que su labor de educar y velar por sus vidas se ha acabado, a veces pueden llegar a sufrir una depresión.

[quote position=»left»]Se da a madres cuyos hijos se han hecho mayores y se han independizado del hogar familiar[/quote]

Estas madres sienten que su vida ya no tiene sentido y están perdidas en su nuevo rol dentro de la familia, les cuesta asimilar la ausencia de los hijos.

Pero este síndrome va mucho más allá y si se lleva bien pueden surgir cosas muy positivas. Esta situación se puede vivir de una forma positiva y es una gran oportunidad de evolucionar y no perder la relación entre padres e hijos.

[quote position=»right»]Puede ser una oportunidad de evolucionar y no perder la relación entre padres e hijos[/quote]

Una de las cosas que puede ayudar a que no sea tan traumática la situación es que la separación sea gradual, es decir, que el hijo avise que se independizará e involucrarla en el proceso de emancipación.

Si se vive la situación en clave positiva, el equilibro se recupera más rapidamente, además se experimenta un sentimiento de satisfacción por haber criado a una persona capaz de valerse por si mismo. Este es un buen momento para recuperar esas cosas que nunca tenías tiempo de hacer y te hubiera encantado realizar.

Pero si no eres capaz de remontar, un gran consejo es no intentar disimular tus sentimientos y pedir ayudar. Hablar de lo que sientes con tu hijo, pareja, amigo o psicólogo… hará que te sientas mejor y no tan sola.

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