Cuando oímos hablar de trastorno alimentario nos viene a la cabeza anorexia o bulimia, pero existen más trastornos alimentarios que vienen causados por el mismo problema: la autoestima.
Un trastorno alimentario puede llevar a la muerte, no sólo por el deterioramiento físico sino a través del suicidio. Pero antes de llegar a este punto el enfermo pasa por muchas fases que si se interviene a tiempo por un profesional, el paciente puede llegar a tener una vida plena, feliz y completamente sana.
[quote position=»left»]Existen más trastorno alimentarios que vienen causados por el mismo problema: la autoestima[/quote]
Cómo os hemos comentado no sólo existe la anorexia y la bulimia sino que hay otros varios:
Anorexia y Bulimia – La anorexia es relativamente común entre los perfeccionistas, personas con un deseo obsesivo de búsqueda de la excelencia. Los pacientes de bulimia intentan controlar el peso induciendo el vómito tras haber comido.
Ortorexia – Se trata de la obsesión por comer sano con una conducta obsesiva. Los síntomas pueden incluir exceso de ejercicio, ansiedad por los efectos sobre la salud de los diferentes alimentos, toma excesiva de vitaminas y otros suplementos dietéticos y una conducta obsesivo-compulsiva en lo referente a la preparación y la limpieza a la hora de cocinar.
Trastorno dismórfico corporal (BDD) – El BDD (siglas de Body Dismorphic Disorder) es una obsesión por un rasgo o un ligero defecto del cuerpo, a veces puede ser imaginario y exagerado por el paciente. Los síntomas son variados, desde evitar los espejos, compararse constantemente con otras personas o buscar formas sofisticadas para ocultar el área que les obsesiona.
[quote position=»right»]Cualquiera de estos trastornos es que esconden profundos conflictos emocionales que deben resolverse[/quote]
Diabulimia, o ED-DMT1 – La sufren específicamente los diabéticos de tipo 1 y consiste en reducir conscientemente la dosis correcta de insulina con la intención de adelgazar. Es un trastorno poco conocido y los síntomas son parecidos a la anorexia, aunque parece que comen bien.
Masticar y escupir – Es un trastorno parecido a la anorexia que consta en reducir la ingestión de comida a base simplemente de masticar y escupir, evitando ingerir la comida. El paciente se permite probar comida que en circunstancias normales no se permitiría.
Trastorno alimentario selectivo – Es más habitual en niños que desarrollan un sentimiento negativo hacia algún tipo de plato, textura o sabor. Cuando se les pone delante se sienten angustiados, pero hay tratamientos específicos y pueden curarse por completo.
Pero la realidad de cualquiera de estos trastornos es que esconden profundos conflictos emocionales que deben resolverse a través de un profesional del tema.
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